En Córdoba nació esta FLOR mora y cristiana que se pasea con su cante desde la Mezquita a la Plaza del Potro, hasta dónde llegaban los gritos y gemidos incansables de Romero de Torres, que buscaba entre el olor cordobés, a su Chiquita Piconera, con dolor por un amor imposible que se quemaba en el brasero de su lienzo y de sus piernas. Dejó sus pinceles y enjugó su llanto en la Fuente del Potro, limpió su boca y sus pensamientos y pidió al arcángel en el puente, la salvación de su arte. Ese arte cordobés que encarna FLOR DE CÓRDOBA.
Flor de Córdoba (Florentina Rodríguez Lora), nacida en Fuente Palmera (Córdoba) el 13 de junio de 1940, es una de las cantaoras cordobesas que más proyección ha tenido dentro de la industria discográfica. Pese a ser conocida desde muy joven dentro del mundo del flamenco, su versión de Los Cuatro Muleros la llevó a serlo mucho más. Más de 40 grabaciones discográficas, con títulos como La Rosa o La Romería Noreña la convierten en una verdadera estrella del momento y en una cantante muy popular.
Respetada y admirada en el mundo del flamenco, y también en el de la copla, tuvo siempre como referente y maestro a Pepe Marchena, quien confesó la admiración que sentía por la que fue su versión femenina, aunque siempre de una manera muy personal, lo que la hacía única y diferente.
Estrellita Castro fue su compañera y llegó a decir de ella que era la mejor en aquel momento, y otros compañeros como Rafael Farina, La Niña de Antequera, Marifé de Triana, La Niña de la Puebla o Antonio Molina le han guardado siempre un especial cariño y respeto.
«Se llama la gaviota
y es la barca mas velera
se llama la gaviota
y el capitán que la lleva
con se querer me disloca.
Que se respira y ya las miro
viento de sol y de espuma
que se respira y ya las miro
y me parece una pluma
trazando nuestro destino
de la mano del cielo la barca vuela
mientras mi marinero suelta las velas
el renglón de mi miedo nadie lo nota
cuando atraca en el puerto la gaviota»
Vida artística
Realizó sus primeras grabaciones a principios de los 60, versionando a ritmo de soleares con fandangos Los cuatro muleros o la milonga La rosa, ambos ya versionados por Pepe Marchena.
En 1963, grabaría para RCA, los temas Al extranjero me fui, Me voy a marchar a Graná y A una nación extranjera.
Un año más tarde y para Marfer, donde realizaría la mayor parte de sus grabaciones, registra entre otros las soleares Flor de Córdoba, Rumbo y tronío que grabara también Carmen Jara, las peteneras 20 de mayo, los fandangos Ven volando, la Romería loreña que estrenara el Niño de la Huerta y unos preciosos tientos titulados Rejas de bronce.
Aparición de Flor de Córdoba
También grabaría un EP de villancicos entre los que podemos destacar Campanas de Navidad.
A 1965 pertenecen los tientos Más importante, la rumba-milonga Rosas y espinos, el tanguillo No suspires por mí, los Fandangos de romería o La luna y el toro.
1966
Flor de Córdoba comenzaba a triunfar por toda España. En Madrid, realizaba numerosas actuaciones en el Imperio junto a Porrinas de Badajoz, Tomás de Antequera, Juanito Osuna y Mary Nistral. En octubre se presentaba en el Teatro Calderón de la mano de Juan Valderrama, en un espectáculo titulado Todos contra mí, musical flamenco formado por otros grandes artistas tales como Niña de Antequera, Amina o Lolita Valderrama.
En las víspera de Navidad, Flor de Córdoba, interviene en el fin de fiesta de un Gran Festival Homenaje al Artista español, celebrado en el Circo Price.
- Flor de Córdoba apareció en espacios de radio y televisivos. Entre ellos participó en la película Los celos y el duende en el año 1967.
- En el libro Rubito de Pastora. Pasión por el Flamenco. De Fuente Carreteros a Badalona se menciona un concurso nacional de los años 60 patrocinado por la marca de refrescos «La Revoltosa» que finalmente ganó Flor de Córdoba. En tercera posición terminó Rubito de Pastora, de Fuente Carreteros.
- El 29 de agosto de 2014 fue homenajeada por el Ilmo. Ayto. de Córdoba con la participación en el acto de artistas de baile, cante e interpretación. El acto se llevó a cabo en el Parque de los Omeyas y supuso un tributo a la carrera de la artista cordobesa.
- Flor de Córdoba es una de las cantaoras cordobesas que más proyección ha tenido dentro de la industria discográfica, sobre todo en los años cincuenta y sesenta. Pese a ser conocida desde muy joven dentro del mundo del flamenco, su versión de Los Cuatro Muleros la llevó a serlo mucho más. Más de cuarenta grabaciones discográficas, con títulos como La Rosa o La Romería Noreña la convierten en una verdadera estrella del momento y en una cantante muy popular.
- Tuvo siempre como referente y maestro a Pepe Marchena, quien confesó la admiración que sentía por la que fue su versión femenina, aunque siempre de una manera muy personal, lo que la hacía única y diferente.
- Estrellita Castro fue su compañera y llegó a decir de ella que era la mejor en aquel momento, y otros compañeros como Rafael Farina, La Niña de Antequera, Marife de Triana, La Niña de la Puebla o Antonio Molina le han guardado siempre un especial cariño y respeto.
- El ayuntamiento de Fuente Palmera, a propuesta de sus grupos políticos municipales acordó en 2015 otorgarle a Florentina Rodríguez el título honorífico de Hija predilecta de la Colonia.
FUENTE: cordobapedia.wikanda.es